31/8/08

Prensa





1 comentario:

darrigrande dijo...

Estimada Sra. Mónica:
Con mucho interés he visto Mesa de Diálogo sobre la biografía novelada „Insaciables“ que usted y Carmen Lutz publicaron conjuntamente en el 2012. Como vivo en Alemania no lo he podido compran aún, trataré de adquirirlo en Espana cuando se dé la oportunidad. Estoy ansioso!

No sé si usted ha tenido la oportunidad de leer „La Senora del Pardo“ de la periodista espanola Carmen Enríquez. Es la biografía no autorizada de Carmen Polo Martínez-Valdés, esposa de Francisco Franco.Es de remarcar si los increíbles paralelos entre Pinochet y su esposa y a la vez entre Franco y la suya. Creo que para entender a Pinochet hay que entender a Franco. El dictador espanol fue inspiración para Pinochet y el modelo franquista de sociedad del nacionalcatolicismo impuesto por Franco era lo que Pinochet quería para Chile.

Tanto Pinochet como Franco provenían de clase media. El padre de Pinochet era comerciante y el de Franco trabajaba en la marina. Ambos tuvieron madres ambiciosas con las cuales tuvieron una relación casi edipiana.

Ambos, Franco y Pinochet fueron alumnos mediocres. Las calificaciones que ambos estuvieron, Franco en la Escuela Militar de Toledo y Pinochet en la Escuela Militar Bernardo O´Higgins no daban para augurar ninguna carrera. No eran hombres de dotes intelectuales, pero eran astutos, manipuladores, con un gran sentido de la oportunidad, „talentos“ que darían frutos en anos futuros.
Cabe sí subrayar que Franco, a diferencia de Pinochet, conoció el campo de batalla en Africa, donde destacó y llegó a ser el general más jóven de Europa con sólo 33 anos. Pinochet sólo jugó con soldados de plomo, sentado en su escritorio.


Ambos recibieron el empuje y el acicate de sus esposas para promocionarse. Ambas eran mujeres arribistas y trepadoras que sabían desenvolverse en el entramado social de los países en que vivían. Los suegros de ambos también interfirieron para „empujar“ las carreras de sus yernos. Ni Franco y mucho ménos Pinochet tenían dotes para desenvolverse en sociedad y sin sus esposas no hubieran llegado a parte alguna. Fueron activas promotoras en el plan de ascenso en el escalafón y en lo social, donde tenían importantes conecciones para promover las carreras.

Tanto Carmen Polo como Lucía Hiriart fueron mujeres amantes del lujo. Carmen Polo en una epoca en la que en Espana había hambre creo la corte del Pardo, que era como una burbuja llena de brillos y ostentación. Lucía Hiriart hizo también lo suyo, con el faraónico proyecto de la casa presidencial de Lo Curro y con las desmedidas exigencias de su vestuario, que encargarba a los más renombrados modistos de su tiempo. Sin embargo tanto gasto lo logró hacer de ella una mujer elegante ni mucho ménos. Hasta burlas desataban sus ridículos sombreros, que con tan poca estatura no le sentaban para nada.

Una vez terminadas las dictaduras, en Espana con la muerte de Franco en 1975, en Chile en 1990, iniciaron estas senoras un retiro dorado. No les fue fácil el aceptar la perdida del protagonismo que tuvieron. Tuvieron que pasar revista a muchos eventos familiares tremendamente negativos como divorcios, escándalos y la desintegración de la familia. Un botón de muestra es Carmen Martínez-Biordiú, nieta preferida de Franco que creo que ya va en su quinto matrimonio. Jacqueline Pinochet ha dado también su campanada de escándalo con sus numerosas matrimonios y relaciones amorosas, Ningún Franco ni ningún Pinochet ha logrado destacar por nada positivo. Después de las muertes de los dictadores pasaron a ser una mediocracia adinerada, pero nada más. A pesar del dinero, los privilegios y ventajas que tuvieron, se impuso el pool genético de los padres nada brillantes que tuvieron que casi por un accidente de la historia llegaron a tener en sus manos las riendas del poder.


Desde la tierra de Goethe, Schiller y Thomas Mann un afectuoso saludo de
Carlos Jorge Stöckel Darrigrande